El agua se desviará hacia la planta potabilizadora y se almacenará en uno de los depósitos, actualmente vacío
El escape se detectó la semana pasada, y se han estado haciendo pruebas para localizar su origen
La semana pasada se detectó un escape de agua en el lago de l’Agulla. En cuanto se hizo evidente la pérdida de agua, que escapa hacia el Torrent de Sant Ignasi, se empezaron a hacer pruebas para averiguar su origen. Desgraciadamente, las pruebas no han localizado el escape, y por tanto, es necesario iniciar un vaciado parcial para poder ver dónde se sitúa la filtración.
En un primer momento, teniendo en cuenta la situación actual de sequía y para evitar al máximo las pérdidas, se reducirá la entrada de agua en el lago, disminuyendo la entrada de agua hacia la Séquia, y se irá traspasando la que existe actualmente hacia la planta potabilizadora de Manresa. La planta potabilizadora dispone de un depósito vacío donde almacenaremos el agua en crudo (sin potabilizar). Si este vaciado no es suficiente para poder ver la avería, se desviará más agua hacia el canal de Viladordis, que se aprovechará para el regadío.
Una vez detectada la avería se procederá a la reparación urgente y se abrirá de nuevo la Séquia al caudal actual para restablecer el agua del lago. Las causas de esta avería no se podrán establecer hasta que no se haya detectado su origen. Gracias a la obra de construcción del bypass en l’Agulla, que se llevó a cabo a principios de año, podremos hacer llegar agua a la planta potabilizadora de Manresa, directamente desde la Séquia.